Mis notas de la intervención de Ricard Riol en la jornada de ICV-EUiA de Barcelona, Barcelona per
Viure del pasado 17/01/2015. La mesa se titulaba “Mejoremos
la calidad del aire para vivir mejor. Propuestas y respuestas.”. La
jornada tuvo lugar justamente después de la alerta por contaminación del aire en Barcelona del
pasado enero, aunque estuvieron convocadas con antelación a ella que
es la mejor manera de solucionar los problemas.
Ricard Riol es ingeniero y presidente a la Associació per a la Promoció del Transport Públic (PTP) [FB] [TW]. Como siempre lo bueno y aprovechable del
ponente y los errores del Senyor_G. Puedes consultar el video a partir del minuto 1:51
hasta el 2:09.
Crisis, coches y motos.
En el balance sobre la movilidad tenemos el efecto crisis ha
hecho resituarse mucho de los discursos que hasta ahora se habían llevado con
errores y aciertos, pero de forma constante, en el ayuntamiento de Barcelona
donde había una gobierno de coalición de izquierdas. Ese discurso ha cambiado.
Con la crisis hay menos movimientos económico y muchos menos
viajes en transporte privado, 200.000 viajes menos. Lo que ha perdido el coche
es mucho más de lo que ha perdido el transporte público desde el 2008. Nos
estamos acercando al cumplimiento de las normativas en partículas en
suspensión, pero corremos el riesgo de volver hacía atrás cuando se reactive la
actividad económicas. Son mejoras coyunturales.
El año 2011 fue año récord en demanda de transporte público, es
más barato que el privado, y un año después la Generalitat lo premia con el
aumento de tarifas más grande de la historia, con lo que el 2012 se tuvo la
mayor caída de demanda del transporte público.
En paralelo tenemos el auge de la moto. La moto es mejor
ambientalmente que el coche, es innegable pero tiene otros efectos. Está
matando mucha gente joven o dejándola con graves discapacidades. Y no puede ser
que sea un 40% más barato que el transporte público[1] ni la
ocupación que hace la moto de la vía pública que toma lo que habíamos
recuperado al coche. Va de puerta a puerta y sin coste para ella. Está
privilegiada[2]
y no lo podemos consentir como sociedad. Y además también contamina.